Fidel Ernesto Vásquez I

17.Ene.2012 / 05:50 pm

Asimismo, el texto expresa el rechazo del máximo ente legislativo a la expulsión de la Cónsul, Livia Acosta, de territorio estadounidense.

En el documento, la Asamblea Nacional, en nombre del pueblo venezolano, manifiesta su repudio ante «los atropellos que se acaban de consumar contra la República Bolivariana de Venezuela» y añade:

«Este hecho (la expulsión de la Cónsul) culmina una secuencia de acusaciones y manipulaciones que plenaron el escenario internacional a propósito de la visita oficial del Presidente de la República Islámica de Irán, Mahmoud Ahmadinejad a nuestra Nación».

Además, enfatizó su apoyo a las medidas que el Gobierno Nacional tomó ante esas acciones, al señalar que apuntan a proteger al personal del consulado, expuesto a amenazas e injurias a raíz de la decisión estadounidense de expulsar a la Cónsul, con base en un documental emitido por una cadena privada de medios (Univisión).

A continuación el texto completol:

LA ASAMBLEA NACIONAL

DE LA REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

Como Vocera del Pueblo Soberano

SE PRONUNCIA EN RECHAZO A LA EXPULSIÓN DE LA CÓNSUL
GENERAL DE VENEZUELA EN LA CIUDAD DE MIAMI, FLORIDA,
ESTADOS UNIDOS, Y RESPALDA LAS MEDIDAS TOMADAS
POR EL GOBIERNO VENEZOLANO

Los pueblos del mundo han venido siendo testigos y sufriendo los múltiples atropellos morales, civiles y militares del imperio norteamericano, que ha utilizado todos los recursos a su disposición, como es el caso de los medios de comunicación social al servicio de la dictadura mediática mundial. Uno de estos atropellos se acaba de consumar contra la República Bolivariana de Venezuela con la expulsión de la Cónsul General de nuestro país en la ciudad de Miami, estado de Florida, Estados Unidos, Licenciada Livia Acosta. Este hecho culmina una secuencia de acusaciones y manipulaciones que plenaron el escenario internacional a propósito de la visita oficial del Presidente de la República Islámica de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, a nuestra Nación.

Las razones esgrimidas para expulsar a nuestra Cónsul se basan en acusaciones sin fundamento provenientes de manejos mediáticos irresponsables, que dejan de lado la objetividad y la veracidad comunicacional que debe tener una cadena de televisión, siendo en consecuencia un acto de injusticia y de poca seriedad política que evidencia las intenciones agresivas del gobierno de Washington.

Consideramos esta expulsión una retaliación política del imperio genocida y criminal estadounidense, dado su interés en destruir y deslegitimar nuestra relación fraterna y soberana con todos los pueblos del mundo, en particular con el pueblo y gobierno de Irán, en momentos cuando este imperio se prepara para una nueva guerra, basándose en infundios, como ya acostumbra, para invadir esta vez a la República Islámica y revolucionaria de Irán, ante lo cual esta Asamblea Nacional resalta y enfatiza la existente relación de hermandad, igualdad y solidaridad revolucionaria y vencedora entre los pueblos y gobiernos de Irán y Venezuela.

Otra de las razones fundamentales de esta arbitraria e inmoral retaliación es la gran frustración del gobierno estadounidense por la creación en nuestro país de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), con la cual se fortalece la independencia y la unión solidaria entre los países de Latinoamérica y el Caribe, que convierte a nuestra región en un bloque político estratégico de gran poder a nivel internacional, haciendo con esto realidad el sueño de nuestro Libertador Simón Bolívar.

Por todo lo antes expuesto, la Asamblea Nacional respalda y apoya la decisión tomada por el Gobierno Bolivariano de Venezuela a través de nuestra Cancillería, de regresar al personal diplomático de nuestro Consulado General en la ciudad de Miami y de iniciar una evaluación de las condiciones de funcionamiento del mismo, siendo ésta una medida tomada para proteger a los funcionarios diplomáticos que laboran en la mencionada legación ante las constantes amenazas, intimidaciones y presiones de todo tipo de las cuales han sido víctimas los mismos, por parte de sectores políticos y organizaciones extremistas, violentas y terroristas, a las cuales el gobierno estadounidense, criminalmente, protege y ampara.

Finalmente, manifestamos nuestro compromiso profundo e inquebrantable con la paz y con el establecimiento de un nuevo orden pluripolar que busque la solidaridad y la justicia social, así como repudiamos las acciones guerreristas y de provocación que de manera permanente son impulsadas por el imperio norteamericano en su afán de dominar el mundo.