Durante la segunda sesión ordinaria de la nueva Asamblea Nacional (AN), en la que los diputados debatieron la memoria y cuenta que el Presidente de la República, Hugo Chávez Frías, los diputados que representan la alianza revolucionaria reiteraron el llamado a emprender un diálogo de altura y hacer política con lealtad, en beneficio de la población venezolana y defensa de la democracia.

El presidente del Parlamento nacional, Fernando Soto Rojas, manifestó al inicio del debate que la discusión debe ser esclarecedora, de altura y de respeto a la población, esto el referencia al exhorto que realizó el Jefe de Estado durante su mensaje anual, en el que pidió “sembrar la semilla del diálogo” en la nueva Asamblea.

El primer diputado en ejercer el derecho de palabra por los sectores de la derecha fue el integrante de Copei Miguel Ángel Rodríguez, quien en ningún momento de su intervención hizo referencia al discurso del Mandatario Nacional, y sólo se abocó a pedir la reforma del Reglamento de Interior y Debate, y pidió una reunión con el Presidente Chávez.

En ese sentido, Omar Barboza, integrante de Un Nuevo Tiempo (UNT), presentó la agenda política de la derecha e insistió en permitir que Venezuela sea intervenida, al solicitar la entrada al país de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Asimismo, Barboza intentó apropiarse del discurso bolivariano de defender la Constitución y la inclusión social.

Ante la ausencia de debate sobre el informe de gestión, el diputado pesuvista Carlos Escarrá señaló la importancia de discutir la memoria y cuenta, y no los planes políticos de los partidos adversos al Gobierno Nacional.

Escarrá también instó a los legisladores derechistas a reconocer la defensa de las miles de personas afectadas por la estafa inmobiliaria, el reconocimiento a los derechos laborales de los trabajadores, obreros y campesinos.

“¿Cómo pueden defender lo que no entienden? Allí es donde está la gran enseñanza en la ética del discurso, si ustedes en 1999 dijeron que esa Constitución no servía y la pisaron, ahora dicen defenderla. No entienden que el socialismo es igual, humanismo y comprensión”, señaló.

Campaña de desprestigio

Dándole continuidad a la campaña de desprestigio que han emprendido los factores de la derecha contra el Ejecutivo venezolano, el diputado suplente integrante de Primero Justicia, Ángel Medina, intentó desviar el debate al calificar como “insuficiente” la labor que desempeña la Policía Nacional Bolivariana (PNB).

Por su parte, la parlamentaria representante de la organización Súmate, María Corina Machado, hizo lo propio criticando el actual sistema de salud.

En ese sentido, la diputada del Psuv Iris Varela indicó que los discursos de los parlamentarios de los sectores de la derecha que intervinieron en la sesión ordinaria carecieron de ética. Además refirió que las cifras presentadas por los sectores reaccionarios no tenían argumento y no precisaron cuál era la fuente de los datos citados en sus discursos.

En respuesta a las críticas, Varela precisó que en los 40 años de la IV República sólo se construyeron 4.804 centros asistenciales. Mientras que en los últimos 10 años del Gobierno bolivariano se han creado 8.317 establecimientos de salud en el país, lo que se traduce en un incremento de 172% de centros asistenciales más.

Como una prueba del desprecio de los factores derechistas al pueblo, Varela presentó un video en el que la diputada María Corina Machado, después de saludar a una ciudadana venezolana, se limpió la cara.

Mientras los parlamentarios derechistas se enfocaban en emitir constantes críticas contra el Gobierno Nacional, los legisladores revolucionarios recordaron que en los últimos 12 años el Ejecutivo ha invertido 300 mil millones de dólares en planes sociales y más de un millón 500 mil personas gozan del beneficio de la pensión del seguro social.

Interrupción violenta de la sesión

La sesión ordinaria fue empañada por un hecho de violencia que propició el parlamentario Julio Borges, integrante del partido Primero Justicia (PJ).

Durante el derecho de palabra del diputado pesuvista Diosdado Cabello, recordando cómo durante la IV República se repartía el dinero de los venezolanos, presentó la copia de un cheque y su certificación por un monto de 25 millones de bolívares, emitido por Petróleos de Venezuela (PDVSA) en el año 1998 a nombre de la Asociación Civil Primero Justicia, que ahora constituye un partido político.

Asimismo, mostró un segundo cheque emitido en el mismo año y por el departamento de Asuntos Públicos de PDVSA por un montó de 60 millones de bolívares destinado a la misma razón política.

Ante la presentación de estos documentos, Borges se acercó de manera violenta, hostil y con gritos al presidente del Parlamento, para pedirle un derecho a réplica, luego de que se le había concedido una intervención de 20 minutos, cuando el reglamento establece 10 minutos.

Desde la tribuna de oradores, Borges también le gritó a Cabello: “Tú y yo hablamos cuando salgamos”, mientras que Soto Rojas le exigía al miembro de Primero Justicia que retornara a su curul.

Ante esta situación, la sesión se interrumpió por algunos minutos y el resto de los diputados se acercaron a Borges para tratar de calmarlo y continuar con el debate.

Cabello exhortó a Borges acudir a la Fiscalía General de la República para abrirle una investigación por el caso y le exigió despojarse de su inmunidad parlamentario para ser investigado.

Borges reconoció que Primero Justicia recibió el financiamiento de PDVSA “para desarrollar el programa de justicia de paz en las escuelas de la empresa y jueces de paz en comunidades. Más bien me siento muy orgulloso de eso”, aseguró.