Fidel Ernesto Vásquez I.

15.Ene.2011 / 01:44 pm

El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez Frías, ratificó su disposición al diálogo con la oposición, y puso como ejemplo de ello el acuerdo que logró con Carlos Azpúrua, propietario de la hacienda La Marqueseña, estatizada en 2005.

En este espacio, recuperado por el Estado gracias a una negociación que fue denominada método “Cha-Az” (Chávez-Azpúrua), existe hoy el Centro Productivo Socialista Florentino, en el municipio Alberto Arvelo Torrealba de Sabaneta, estado Barinas.

Apuntó el primer mandatario que este proyecto es un emporio productivo de carne, leche y ganadería “de la mejor en el continente”.

“Esto es un ejemplo de lo que podemos hacer a través del diálogo, quitándonos la contaminación demoníaca, el veneno que algunos se han encargado de inyectar y muchas veces nuestras actitudes de potenciar, producto de los conflictos, las batallas y la pasión de lo que somos caribe, sangre rebelde”, expresó.

“No perdamos esta nueva oportunidad. El espacio es de ustedes. Yo, desde mi puesto de combate, estoy a disposición de ustedes”, dijo a los diputadores opositores presentes en el Palacio Federal Legislativo tras sus cinco años de ausencia por abstenerse de participar en las elecciones parlamentarias de 2005.

También afirmó este sábado, al iniciar la presentación de su memoria y cuenta 2010 ante la plenaria de la Asamblea Nacional (AN), que responderá, en una exposición de unas cinco o seis horas, a la carta que este viernes le dirigieron integrantes de la llamada Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que agrupa a la derecha venezolana.

Señaló, en el acto transmitido en cadena de radio y de televisión, que aunque tenía previsto un mensaje de un par de horas, recibir la misiva le obligó a extender su discurso.

La carta enviada por la derecha venezolana indica: «Los venezolanos aspiramos a escuchar el día sábado que usted se refiera a los problemas reales de la gente, aquellos que no le permiten trabajar, estudiar, vivir, progresar en paz».

Acompañaron a Chávez en su alocución diferentes colectivos populares, como deportistas, movimiento de pobladores, campesinos, trabajadores, estudiantes, indígenas y de la clase media.