El presidente de la organización Periodistas por la Verdad, Marcos Hernández, manifestó su rechazo a la televisora privada Globovisón por considerar que es “un canal que ha desvirtuado el periodismo, que se ha olvidado de informar, en un plan de desestabilizar al país”.

Hernández destacó que este medio también se encarga de crear temor en todos los espectadores: “este canal se ha convertido en 24 horas de terror”.

Durante su intervención en Entre Periodistas, Hernández señaló que el presidente de Globovisión y prófugo de la justicia venezolana, Guillermo Zuloaga, quien es acusado por la Fiscalía de cometer delitos de usura genérica y agavillamiento, se ha encargado de desvirtuar al Gobierno Nacional en sus viajes al exterior.

“Yo fui testigo de como el señor (Guillermo) Zuloaga en una reunión de la Sip (Sociedad Interamericana de Prensa ) donde dijo abiertamente que el Presidente de la República, Hugo Chávez, ordenó disparar sobre la marcha del 11 de abril, yo he sido testigo de múltiples declaraciones del señor Zuloaga fuera del país, atentando contra las instituciones y la estabilidad democrática de este país».

Al respecto, hizo énfasis en que más alla de la postura política «de oposición» que pueda tener este canal, están las acciones de sus socios «(Nelson) Mezerhane y el señor (Guillermo) Zuloaga prófugos, ambos delicuentes», quienes «ni siquiera están enfrentando su problema aquí en Venezuela» y se han dedicado a través de este canal «a desestabilizar, crear zozobra, pánico», expresó Hernández.

Mezerhane es el presunto responsable de la quiebra del Banco Federal, que desde octubre del año 2009 presentaba irregularidades. Huyó en junio pasado del país con el dinero de 500 mil clientes que confiaron sus ahorros a esta entidad bancaria.

Tiene una orden de aprehensión del Ministerio Público por la presunta comisión de los delitos de asociación para delinquir, aprovechamiento fraudulento de fondos públicos, aprobación indebida de créditos, apropiación y distracción de recursos financieros, difusión de información financiera falsa y ocultamiento de información en la declaración institucional.

Mientras, Guillermo Zuloaga fue imputado por la Fiscalía General de la República en junio de 2009 por los delitos de usura genérica y agavillamiento al no poder justificar la tenencia de 24 vehículos de lujo, los cuales fueron decomisados el 24 de mayo de 2009, en su residencia en la urbanización Los Chorros, en Caracas.

Ese mismo mes, Zuloaga reconoció ante la prensa que los vehículos que eran vendidos en el concesionario Toyoclub Valencia sí tenían sobreprecio. “Puede ser que especulemos, pero damos fuentes de empleo”, declaró el presidente del canal opositor Globovisión, en esa oportunidad.

A Zuloaga y su hijo Guillermo Zuloaga Siso, ambos propietarios del mencionado concesionario, les fueron dictadas órdenes de aprehensión, pero ambos ciudadanos huyeron del país hacia Estados Unidos para evadir su presentación ante los tribunales venezolanos.