Fidel Ernesto Vásquez I.

6.Mar.2010 / 01:41 pm

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El Presidente de Honduras Manuel Zelaya está asistiendo este mediodía al Congreso Extraordinario que celebra el PSUV. Zelaya ha sido recibido con una gran ovación y con el cántico “Alerta que camina la espada de Bolivar por América Latina”.

En el acto se encuentra presentes, entre otros dirigentes del PSUV, el Vicepresidente del Psuv de la Región Nor-oriental Aristóbulo istúriz, el Canciller Nicolás Maduro y la Presidenta de la AN Cilia Flores.

 

El presidente legítimo de Honduras, Manuel Zelaya, fue recibido este sábado en el Congreso Extraordinario del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), que se desarrolla en La Rinconada, Caracas.

Entre aplausos, el mandatario constitucional hondureño expresó: “Viva Venezuela, viva la Revolución Bolivariana”, tras lo cual entonó junto a los delegados el himno de la tolda roja.

La vicepresidenta del PSUV, Cilia Flores, indicó que es un honor la visita de Zelaya al Congreso, al tiempo que ratificó la solidaridad de Venezuela desde el golpe de Estado que lo apartó del poder en Honduras el año pasado.
“No reconoceremos ningún Gobierno en Honduras que sea producto de un Gobierno de facto”, aseveró.

De igual modo, señaló: “Es un honor tener aquí al presidente Mel Zelaya en nuestro Congreso. Aquí están los delegados y delegadas del PSUV, seleccionados por la militancia en elecciones de base, para abordar este momento histórico en una coyuntura que marcará pauta para el futuro”.

Destacó que este Congreso Extraordinario acompaña las políticas nacionales e internacionales del presidente Hugo Chávez.

“Viva Zelaya, viva Honduras”, exclamó Flores, lo que desató los aplausos de los presentes

Zelaya, de visita en Caracas desde el pasado jueves, asistió al Congreso acompañado de su hija Xiomara Hortenzia Zelaya “La pichu”, Rasel Tomé. La noche de este viernes se reunió con el jefe de Estado.

El mandatario hondureño emprende una dura batalla internacional por recuperar la democracia constitucional en su país, luego que el pasado 28 de junio de 2009, un grupo de militares encapuchados lo secuestraron y lo sacaron de Honduras, usando una base militar estadounidense para posteriormente dejarlo en Costa Rica.