“Desde la Cumbre Social se planteó la idea de crear un instrumento que pudiera confrontar el peso del imperio,  y surgió la Carta Social de las Américas; porque la Carta Social debía obligar a los gobiernos y ponerles condiciones para universalizar los derechos sociales, los derechos económicos, los derechos culturales, y planteaba un concepto de la democracia distinto al concepto restringido sólo a los derechos políticos y civiles  como hasta ahora se había venido  definiendo”.

Así lo expresó Aristóbulo Istúriz, candidato por el PSUV a la alcaldía Metropolitana, durante la clausura de la VII Cumbre Social por la Unión Latinoamericana y Caribeña, “Alternativa Bolivariana para los pueblos de nuestra América, ALBA”, en donde  se analizó la independencia tecnológica, alimentaria y soberanía de los pueblos  en materia de cooperación, solidaridad y complementariedad de los pueblos de nuestra América, sumando esfuerzos para  consolidar el ALBA.También  indicó que todos debemos conocer el contenido de la Carta Social de las Américas, la cual compromete  a  los países hacer un esfuerzo  de  inversión social y de garantizar  los derechos de los ciudadanos para poder definir la democracia.

De igual modo resaltó que hay que construir un modelo alternativo al capitalismo, que sea viable, creíble y sostenible. “Debemos ser lo suficientemente creativos para construir la razón de un proyecto alternativo y como en política es fundamental la razón y la fuerza;  de nada vale construir la razón si no somos capaces de construir la fuerza que materialice la razón”

Aristóbulo enfatizó que fundar el poder popular es una tarea política esencial,  y a la vez recordó que Venezuela debió pagar por lograr el impulso del proyecto Revolucionario. “Nos costó un golpe de estado, nos costó un golpe financiero,  un golpe militar, una huelga general, un paro petrolero; nos costó la presencia de paramilitares, nos costo un referéndum revocatorio ratificatorio y la demanda  de la Exxon Móvil a PDVSA”.

“Ese poder que tiene el presidente Chávez de convocatoria y comunicación, tenemos que repartirlo, a Chávez tenemos que rayarlo, ponerlo en un plato y ponerle el ventilador  para que  cada venezolano y cada venezolana tenga una chispa y poder de Hugo”, señaló.

Concluyó que la tarea es organizar al pueblo para dotarlo de conciencia política y ayudarlo a construir un proyecto, “que no es otra cosa que una especie de brújula que en medio de una tormenta nos va a decir hacia donde  debemos navegar, y por más peligroso que sea el camino, si es por ahí, es por ahí, nuestro norte es el sur”.